domingo, 28 de julio de 2013

ACTUALIZACIÓN DEL DIA DE FÁTIMA Y BORJA ESCRITO POR FÁTIMA

Cambio de habitación, cambio de cama y de compañía, pues hoy no dormí sola. Borja ocupó mi habitación en el sótano y yo dormí en las literas en la habitación de Zeana (ninguna queja de mi compañera salvo que ¡vaya susto me pegó a las seis cuando se le calló un cojín desde arriba a mi cara!).
A las nueve estaba abriendo las persianas para que la luz del sol despertara a Borja de una forma agradable y me dijera un amable 'buenos días' pero lo único que salió de su boca al mismo tiempo que se retorcía fue 'Hola k ase'. Después de que los dos nos desperezáramos un poco de nuestro sueño, subimos a la cocina y nos preparamos un ligero desayuno para el viaje en coche que nos esperaba hasta un arcade (recreativo) cerca de Canada's Wonderland. Realmente Zeana, Borja y yo pasamos una estupendísima mañana jugando a toda cosa que se nos ponía enfrente. Después de eso fuimos a un mall cercano que nos impresionó bastante ya que la entrada es una enorme tienda de pesca, alpinismo, etc. Todo ambientado como una casa de montaña, con osos por las paredes, peces (sí, peces de verdad), etc. Pero luego de pasar por debajo de una pequeña cascada ya estabas en un mall normal, aunque muy grande...
Pasamos un 'dormido viaje' pasado por lluvia hasta Courtice donde nos apalancamos en casa. Yo, como persona previsora que no sé si he sido alguna vez, dejé la maleta preparada, sólo me queda por meter mi neceser. Cenamos otra vez entre risas y anécdotas y, oh Dios mío, mi host father se dedicó a ponerme vídeos de Bruce Springsteen en su 'Apple TV'.
A las ocho y media estábamos mi host father, Zeana, Sam (que, sinceramente, la echaba mucho de menos), Borja y yo en el coche de camino a la bolera. Allí nos encontramos (un encuentro previsto con anticipación por su host y el mío) José, Steven y Olivier. Lo primero que hicimos fue ir a los karts. Y luego sí, ¡bolos! (Debo admitir que una de las cosas que más ilusión me hace es ponerme esos zapatos tan originales...). Lo mejor es que como fuimos de noche la bolera estaba a oscuras y llena de luces y música por todos los altavoces lo que nos sirvió de motivación y a la vez diversión en nuestra última noche canadiense. Después de dos partidas, ya daban las once de la noche hora a la que la bolera cerraba y dejando una más que satisfactoria lista de posiciones ('la práctica hace logros' y bueno, para ser la segunda vez que juego no tengo queja).
En primera posición Steven pues como nos acabó confesando es todo un experto tanto con la clásica bola grande como en la nuestra, una pelota pequeñita. La plata se la llevó Olivier que bueno, después de haberse comido todos los cereales algo tenía que hacer, ¿verdad José? Cerrando el podio estoy yo, muy contenta por haber superado mi última puntuación. Zeana y Sam seguían la lista, luego Borja y por último José.
Ganadores o no ganadores pasamos una maravillosa última noche, así que ahora queda dormir e irse despidiendo de esto.
Gracias a todos por este mes.